domingo, 28 de abril de 2013


Auto-Abastecimiento Industrial y Alimentario..! Una realidad...

La independencia de un país dependerá exclusivamente de su capacidad de autoabastecimiento industrial y alimenticio, de allí la importancia en las políticas que se implementen para procurar la mayor estabilidad interna y para sostenerlas en el tiempo.

El Pueblo organizado en Unidades de Producción Socialistas representan el apoderamiento del Poder Popular de los medios de producción, un tipo de empresa de manufactura diferente a una empresa mixta o recuperada socialista que siendo “empresas del estado” son objeto de saboteo tanto interno como externo, dentro del juego político. Las UPS son del Pueblo, quien no permitirá ni el sabotaje, ni la expropiación por parte del capital y la defenderá porque de ellas dependerá su nivel de vida, aunque quienes participen piensen distinto políticamente hablando, porque lo que hagan a la UPS  directamente les afectará sus intereses económicos, intrínsecamente poseerá un mecanismo autoregulador y todos serán uno, empujando para el mismo lado, empujando hacia un futuro mejor y haciendo mejor país nuestra Venezuela.

Un sistema de producción mediante UPSs, sería cerrado todo lo necesario en una UPS lo fabricaría en lo posible otra UPS de manera que el capital producido haga un ciclo de crecimiento interno que no permita fugas al mercado capitalista, ni a la banca comercial que a pesar de beneficiarse enormemente del país juegan a su inestabilidad y a destruir la Revolución. Ejemplo de ello Grupo Provincial, que obtuvo en Venezuela más ganancia que la obtenida en EEUU y aquí se atreven a conspirar como no lo harían allá y también el resto de la banca comercial.

La principal fuente de alimentos proviene del sector agropecuario, por lo tanto debe ser el área a fortalecer, como el pilar fundamental donde se sostiene la soberanía. Se debe establecer mejor nivel de seguridad social a nuestros productores y que mejor que reciban la ganancia justa de su esfuerzo y su trabajo, que sientan la inclusión mediante la verdadera participación, donde logren aumentar sus ingresos por la explotación científica y tecnológica de la tierra y otros recursos. Tenemos que convivir con la agricultura y la producción animal como estrategia para la subsistencia. Nuestro país antes de ser una potencia energética fue una potencia agropecuaria, donde lideró renglones de exportación como  el cacao, tabaco, café, añil, carnes y pieles.

Luego el boom petrolero nos hizo un país sumamente dependiente abandonando casi por completo la explotación del agro desde entonces y no hemos podido romper ese yugo aún, en el año más reciente 2012 nuestras exportaciones petroleras a EEUU fueron de 38.726 Mil Millones de Dólares básicamente petróleo y nuestro país importó de ellos 17.631 Mil Millones de Dólares (la cifra record jamás alcanzada) la compra de alimentos agrícolas a EEUU subió 38% en 2012, al llegar a $836,7 millones, liderado por la adquisición de maíz con $404,3 millones, cuya cifra casi se duplicó en comparación con 2011 y el trigo con $264,1 millones que subió ligeramente. Dentro de otra categoría de productos comestibles se destacó el aceite de soya con un monto de $418,7 millones el año pasado, contra los $333,5 millones del año anterior.

En la práctica, Venezuela dejó de percibir en 2012, $9.800 millones en comparación con el 2011 en el intercambio económico con EEUU.

Estamos a tiempo de invertir en otra dirección. Pero debemos cambiar la mentalidad, las UPSs deben elaborar productos de alta calidad, con incorporación de la tecnología nacional, y me refiero que la maquinaria necesaria la produciría otra UPS, tenemos la capacidad para hacerlo. Debemos dejar de pensar que una UPS es solo producir artículos artesanales o de materias primas, en la transformación está el valor agregado por lo tanto las UPS deben terminar siendo empresas sociales que aporten directamente al desarrollo nacional, que generen empleo, que se distribuyan por todo el territorio nacional y acabar con la hegemonía de las improductivas empresas privadas que solo se consumen las divisas del país sin producir divisas a cambio.

Fedecámaras habla con cifras  de que ellos antes de la Revolución eran el 18% del PIB, claro lo que no dicen es que el Petróleo entonces costaba casi $7, hoy día la participación de ellos ronda por un dígito con un barril promediando los $100. Estas empresas han vivido a costillas del Estado durante todo el período pre-revolucionario, con préstamos a bajos intereses y con protección legal de importaciones que eliminaban la competencia, en fin son una casta parásita. Los que más, se dedican a la importación y luego a especular en el mercado, (Distribuidores de vehículos por ejemplo, aquí cuestan 300% más que en el resto de Suramérica) ellos no producen nada. Y el único grupo productor de alimento es un monopolio apátrida y golpista.

En países donde la alimentación depende del mercado globalizado, cualquier incidente externo afecta el abastecimiento. Como el clima, desde lluvias torrenciales hasta fuertes veranos en los sitios de cosecha, epidemias virulentas en las zonas de cría de animales de consumo, prácticas ilegales y engañosas de empresas proveedoras, prácticas delictivas en los mercados bursátiles. Y así de miles de formas se corre el riesgo de sufrir de escasez, precios inestables y especulativos, inflación, hambre que a la final terminan en desestabilización. Tienes que producir tu propio alimento, o el dinero con que comprarlo. Y hasta ahora la empresa privada no ha contribuido en nada para el ingreso de Dólares, por su total ineficiencia.

El Estado debe garantizar el suministro de alimentos  a su población, recuperar esa responsabilidad que se la quitó la empresa privada por medios de todos conocidos, usando el poder del capital, se hicieron del poder político, del poder legislativo  y del poder judicial corrompiéndolo, permitiendo entonces la creación de monopolios enteros que hoy nos extorsionan. Y la empresa privada no solo se apropió de la producción de alimentos, prácticamente lo hizo con todos los servicios del Estado, en Educación desde Maternales hasta Universidades con Post-Grado, en Salud desde Farmacias y Laboratorios de Bioánalisis hasta Clínicas-Hospitales, en Viviendas toda construcción civil se ejecutaba a traves de Constructoras Privadas, en Seguridad se desplazó la vigilancia policial por servicios privados de guardia y custodia, en Comunicaciones hasta el Correo Nacional fué arropado por las empresas de encomiendas hasta en una oportunidad perdimos la CANTV. Hubo un cambio mental en la sociedad que terminaba repudiando al Estado. Y surgió el Comandante, la llegada oportuna de Chávez y la Revolución impidió que se hicieran de una de las empresas más grandes del mundo, nuestra PDVSA.

La recuperación de latifundios ociosos, ha sido el paso inicial. La selección de tierras para asignarles los tipos de cultivos e ir organizando las cosechas, ha sido otra forma inteligente de enfrentar el problema agrícola de producción efectiva de alimentos. Ahora hay que lograr que esas cosechas lleguen a feliz término y sean materias primas de empresas socialistas fieles al proceso, no se justifica, que el esfuerzo campesino engrose las cuentas de capitales apátridas. El mayor valor agregado está en el procesamiento y manufactura, ámbito que se ha dejado también bajo la tutela del capital, con aquella historia mil veces repetida que las empresas del Estado no  producen beneficios económicos, llegó el momento de romper este faláz paradigma.

Debemos crear un sistema de producción paralelo al capitalista y en manos del Pueblo, quien deben sentir la pertenencia y así integrarse de manera vital al momento histórico actual. Empezando por el campo, de la disposición del campesino venezolano no tengo dudas y en su mayoría respaldan la Revolución, pero la falta de conocimientos de nuevas técnicas de producción, la falta de medios tecnológicos que mejoren sus ganancias económicas, no disponer de semillas de mejor rendimiento, todo esto provoca el desánimo de muchos, siendo víctimas del engaño de campañas sucias en contra del Estado y hoy de la Revolución, se dejan convencer  migrando de nuevo a las ciudades subempleándose y entregándose a la miserable explotación del Capital, vendiendo las tierras cedidas a oportunistas, creándose nuevo latifundistas y sus terribles consecuencias.

Por lo tanto, los proyectos Agropecuarios, deben ser tratados como de seguridad nacional, el autoabastecimiento de alimentos tiene que ser una meta que debemos concluir exitosamente. Hay que garantizar mínimo la producción diaria de  42.690 Tn alimentos y con un excedente estratégico. La empresa privada quien prácticamente se encarga de la producción de alimentos manufacturados, en el año 2012 tuvo un crecimiento de apenas 0,7%,  y en otros renglones como la producción de azúcar y en derivados lácteos fué negativo.

Me permito un solo ejemplo. Nuestros productores de maíz que cosechan con semilla nacional, un maíz poco productivo con un bajo rendimiento de Tn/Ha, porque sus características no lo permiten, son semilla pequeña, mazorca grande, bajo número de semillas por mazorca y menos mazorcas por planta, esto deja muy poca ganancia al productor y si  sumamos la multa por contenido de humedad al momento de arrimar la cosecha ya que las cosechas terminan en invierno y en el campo no disponen de plantas secadoras de semillas las ganancias son menores, mientras se gastan $404,3 Millones en la importación de maíz híbrido. Deberíamos traernos la semilla híbrida importada, hasta que aquí se logre un híbrido nacional que compita en productividad. Y que estos Dólares se queden en el campo. En el mercado internacional de la semilla, se produce un nuevo híbrido de maíz cada 4 años que supera las anteriores semillas. Este debería ser un reto como punto de investigación de los científicos venezolanos y recuperar los años de atraso que en esta materia tenemos.

 

Nota: híbrido no es transgénico. Híbrido es el resultado de la unión natural de diferentes razas de Maíz, donde se potencian las características predominantes de cada raza.

 

Saludos.. Chao chao

El Pajarito

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